LA VISIÓN DE LOS DOS PAPAS EN GARABANDAL

LA VISIÓN DE LOS DOS PAPAS EN GARABANDAL-PDF

Juan Suárez Falcó

Queridos hermanos.

Por su extraordinario interés y actualidad traemos a colación una bastante poco conocida visión que las niñas Conchita, Mari Loli, Jacinta y Mari Cruz tuvieron en Garabandal el 25 de julio de 1961.

La extraemos del libro ”Garabandal. ¡Llegó la Hora!”, de Santiago Lanús, al que pueden acceder libremente en

http://www.pueblodemaria.com/GARABANDAL_Llego_la_hora.PM.pdf:

Dice así:

“Día 25 de julio de 1961, festividad de Santiago Apóstol.- Este día tenía una pareja en la Calleja, y otra frente a la casa de Conchita. Las cuatro videntes jugaban en el prado de una cerca y serían aproximadamente las siete y media de la tarde. El cielo estaba completamente libre de nubes. De pronto se formó una nube muy negra encima de Piedra Sagra, y al mismo tiempo se vio un rayo muy grande de arriba abajo. Las videntes cayeron de rodillas con gran temor. El trueno fue muy estrepitoso; las niñas con la vista extasiada hacia arriba. Tuve que apaciguar los gritos de la madre de Mari Cruz, y todos permanecimos en silencio; y hay quien dijo muy serio, sin darle importancia, que había visto sobre la luna una figura o dos, como viste el Santo Padre”.

BREVE COMENTARIO

1. El episodio lo vivieron los presentes como algo dramático. Obsérvese cómo tras el rayo las cuatro niñas cayeron de rodillas, como implorando perdón. Y el grito de la madre de Mari Cruz revela la tensión y el miedo que allí se vivió. Por tanto, la visión se refiere a un momento crítico y terrible para la Iglesia, como ahora intentaremos explicar.
2. Fijémonos en la hora del episodio: eran aproximadamente las 19.30 horas. La supuesta elección de Jorge Mario Bergoglio como papa se produjo a las 19.06 minutos.
3. El Cielo estaba claro y sin nubes y repentinamente una nube negra cubrió la Peña Sagra: justo lo que ocurrió el día de la renuncia de BXVI, 10 de febrero de 2013, pues sobre las 11.45hs., hora de la renuncia – nula – del papa, el Cielo romano estaba raso y solo unas pocas horas después, subrepticiamente, todo se puso oscuro, las nubes negras cubrieron la ciudad de Roma y un rayo cayó con gran estruendo en la Cúpula de la Basílica del Vaticano, a las 17 horas y 54 minutos. Este episodio parece remitir a Lucas 10:18: «Yo veía a Satanás caer del cielo como un rayo».

Ese oscurecimiento repentino por causa de una nube negra bien podría remitir también, simbólicamente, al error instalado en la Iglesia tras la supuesta elección del cardenal argentino. Véase que las niñas jugaban animosamente en el prado y de repente ocurrió todo, es decir, cuando pocos lo esperaban, cuando parecía, de puertas afuera, que en el Vaticano todo era tranquilo y pacífico, la supuesta dimisión de Benedicto XVI sorprendió a todos, y fue el pistoletazo de salida de la subversión en la Iglesia. El mismo Cardenal Sodano, hablando – sin querer – proféticamente describió esta renuncia “como un rayo en cielo despejado”.

https://noticias.caracoltv.com/mundo/esta-periodista-dio-la-historica-chiva-de-renuncia-de-benedicto-xvi

Esa visión parece querer indicarnos que la tormenta se desataría en el momento en que más tranquilidad parecía haber en la Iglesia.

4. El rayo puede ser Satanás entrando en la cima de la Iglesia, como se ha dicho. Aunque también puede referirse al próximo cisma de la Iglesia, tantas veces profetizado por el Cielo, cuando dos papas estén a la vez en Roma. Ese cisma solo podría darse, a mi juicio, si el papa (BXVI) alza la voz diciendo que él es el papa reinante, que su renuncia fue nula y que Bergoglio es un impostor, el falso profeta de Apocalipsis 13. Ahí se daría el episodio contado por Ana Catalina Emmerick de dos papas enfrentados en Roma, y la visión de la pastorcita Jacinta de Fátima.

Hagamos un poco de memoria: en la tercera memoria, Sor Lucía de Fátima escribió: “Un día fuimos a pasar las horas de la siesta junto al pozo de mis padres. Jacinta sentose al borde del pozo; Francisco, conmigo, fue a buscar miel silvestre en las zarzas de un matorral que había junto a un ribazo de allí. Pasado un poco de tiempo, Jacinta me llamó: – ¿No has visto al Santo Padre? – ¡No! – No sé cómo fue. He visto al Santo Padre en una casa muy grande, de rodillas, delante de una mesa, llorando con las manos en la cara. Fuera de la casa había mucha gente, unos le tiraban piedras, otros le maldecían y decíanle muchas palabras feas. ¡Pobrecito, el Santo Padre! Tenemos que rezar mucho por él… Jacinta me preguntó después: – ¿Es el mismo que yo vi llorar y del cual aquella Señora nos habló en el secreto? – Lo es – respondí”.

Repare el lector que ese papa podría ser BXVI, si realmente hablara dentro de poco, denunciando lo que ocurre en la Iglesia desde el 13 de marzo de 2013 y que entonces sería él el papa de la visión del Tercer Secreto, es decir, el que sale de Roma entre cadáveres de sacerdotes, camino del exilio puesto que una revolución se desata en Roma y, tras el cisma, la inmensa mayoría de la Iglesia, apostatando, perseguiría a los sacerdotes fieles para matarlos.

5. Nótese que la nube negra cubrió la Peña Sagra. La Peña Sagra es un lugar sagrado donde han ocurrido muchos acontecimientos sobrenaturales. Es una cordillera de hasta 2000 metros de alto que recorre en paralelo todo el Sur del municipio de Garabandal. Su nombre significa, etimológicamente, “Piedra Sagrada”. ¿Y cuál es la Piedra Sagrada de la Iglesia? Pedro, el papa, sobre la que Cristo edificó su Iglesia. Esta visión, alude, pues, al error y a la confusión instalada de repente, de manera inesperada, en el Vaticano, el corazón de la Iglesia, como así ha sido desde el 13 de marzo de 2013.

A mí esta visión me recuerda también al profeta Elías en el monte Horeb, llorando solo porque todos en su época habían apostatado. Y a la tormenta, el rayo y el viento, en los que no estaba Dios (1 Reyes 19, 11).

6. Lo más impactante es el hecho de que los allí asistentes vieron a dos personas vestidas como visten los papas, es decir, de blanco y con solideo. Esto no ha ocurrido nunca en la historia de la Iglesia. Solo desde hace seis años viene ocurriendo en Roma.

Nótese que los videntes no dijeron que vieron a dos papas, seguramente porque, inspirados por el Espíritu Santo, el mensaje llevaba implícito que uno de ellos no lo era realmente. Se limitaron a decir que eran dos personas vestidas a la manera de los papas.

Y esas dos personas aparecieron visibles en la Luna. La Luna puede significar la Iglesia, que no brilla por sí misma sino porque refleja al Sol de Cristo, que la fundó y que vive en Ella como Dios vivo, presente realmente en la Eucaristía; y que refleja también el fuego del Espíritu Santo, que la guía. Por tanto, dos papas en la Iglesia, en una Iglesia que cambiaría (la Luna representa también lo cambiante, lo mutable) por completo al darse esa circunstancia desconcertante: un cambio perverso hacia la apostasía, hacia la gran apostasía de la que habló San Pablo, que sale desde la cima de la Iglesia y que podría resumirse sencillamente como el mundo, lo mundano (lo cambiante) entrando en la Iglesia.

2 Tesalonicenses 2, 3-5: “Que nadie en modo alguno os engañe, porque antes ha de venir la apostasía y ha de manifestarse el hombre del pecado, el hijo de la perdición, que se opone y se alza contra todo lo que se dice Dios o es adorado, hasta sentarse en el templo de Dios y proclamarse Dios a sí mismo. ¿No recordáis que estando entre vosotros ya os decía esto?”.

Nótese que los allí presentes dijeron haber visto a una o dos personas. Parece evidente que vieron a dos, pues si hubiera sido una sola no hubiese cabido lugar para la duda. Y esas dos personas eran, sin duda, BXVI y el Card. Bergoglio.

7. Por último, observe el lector que esta visión se produjo el 25 de julio, día de Santiago el mayor, patrón de España. La significación de esta onomástica y su relación con la visión permanecen aún oscura. Pero parece estar haciendo alusión a España y a su trascendental papel como nación en el fin de los tiempos. Y también de la hispanidad. ¿Puede referirse a que BXVI huirá de Roma en dirección a España, a Garabandal cuando se produzca el cisma y la posterior revolución aludida en la visión del Tercer Secreto de Fátima o en las apariciones de Trè Fontane, cisma que, además, auguramos para dentro de pocos meses? Recuérdese que en Garabandal la Virgen dijo que un papa visitaría Garabandal.

¿O podría referirse al hecho de que el cisma se hará formal un día 25 de julio?

Dios nos da pistas y señales para no dejarnos ciegos, pero siempre se reserva algunos elementos esenciales de la profecía.

Hemos querido recordar esta visión en Garabandal y su significado profético para que nuestros lectores estén avisados.

Quien quiera entender, que entienda….

María Santísima, Virgen del Carmen, ora pro nobis.