Cuando era pequeña, llegaba a nuestra casa la capillita de visita domiliciaria con la Virgen Peregrina de Fátima. Recuerdo que mi madre, tal y como llegaba, la colocaba en un lugar preferente del comedor y por las noches le rezábamos el rosario en familia. Tras el rezo, leíamos un folletito que venía con la imagen, en el que se leía una oración por el Triunfo del Inmaculado Corazón de María y por la consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón, pues, recordábamos el mensaje que Ella misma dio en Fátima: «…..si Rusia no es consagrada a mi Corazón Inmaculado, ella esparcirá sus errores por el mundo…..»
En dicho folleto le pedíamos a nuestra Señora de Fátima aniquilara el comunismo ateo, y convirtiera a sus aliados y favorecedores. La parte que más me impresionaba de dicha lectura era el recuerdo que se tenía hacia aquellas familias cristianas que en países comunistas como Rusia, tenían que tener escondidos sus iconos, para poderlos sacar en tiempos mejores. ¡Nunca olvidaré eso!
El comunismo perseguía y mataba a muchos cristianos, no solamente en Rusia, sino en China, y en Camboya, Vietnam, Corea del Norte……..¿seguimos?
Para muestra, tomo del «Libro Negro del Comunismo» los datos aproximados de los muertos que el régimen del terror ha hecho a lo largo de sus revoluciones e implacables actos execrables en sus Gulags, y mediante torturas y hambrunas, sin contar sus numerosísimas deportaciones y represiones sistemáticas :
- 20 millones en la Unión Soviética
- 65 millones en la República Popular China
- 1 millón en Vietnam
- 2 millones en Corea del Norte
- 2 millones en Camboya
- 1 millón en los regímenes comunistas de Europa oriental
- 150.000 en Latinoamérica
- 1,7 millones en África
- 1,5 millones en Afganistán
- 10.000 muertes provocadas por el movimiento comunista internacional y partidos comunistas no situados en el poder.
- 38.000 a 85.000 en España durante la Represión en la zona republicana durante la Guerra Civil Española.
Después de todas estas cosas que se han dicho hasta aquí y que inclusive los niños de 12 años teníamos clarísimas sobre la maldad del comunismo y de sus obscuros fines, hoy recibíamos con estupor, indignación y profunda tristeza la noticia aparecida en el periódico La Repubblica, en la que Francisco responde a una entrevista realizada por el periodista y fundador del emblemático rotativo, Eugenio Scalfari. En dicha entrevista leemos como Francisco hace una declaración realmente alarmante, máxime viniendo de quien viene: «Son los comunistas los que piensan como los cristianos».
Vi hoy muchos comentarios en facebook; la gente no podía creerlo. Tuve que pegar el link de la web del periódico, porque muchos no daban crédito a que dichas afirmaciones hubieran podido salir de boca del Papa , estaban poco menos que escandalizados, y no es para menos.
También yo me escandalicé , y muchos conmigo, cuando Evo Morales entregó el Cristo crucificado en una hoz y un martillo a Francisco durante el viaje que el pontífice realizó a Bolivia en julio del 2015. Públicamente dije que eso era un insulto a tantos mártires del régimen y a sus familias. Tampoco comprendo a día de hoy, en ningún caso, las visitas amigables de Francisco a ciertos personajes como los hermanos Castro, o el favoritismo mostrado descaradamente hacia Juan Manuel Santos al invitar subliminalmente a todos los colombianos a votar en pro del SÍ en el plebiscito de falsa paz con las milicias comunistas de las FARC.
Muchos católicos de bien se preguntan hoy si fueron engañados «cuando seres desalmados les hablaban de las maldades destructuivas del comunismo»; si es que acaso les hincharon la cabeza de mentiras y falsedades pues de los comentarios del Papa se desprende que el comunismo «solo busca el bien del ser humano y la igualdad de los pueblos»…….Pues sepan, amigos, nadie les engañó nunca al decirles que el comunismo es una lacra de las peores del mundo. Si así fuera, la Virgen sería una embustera, pues Ella fue la que pidió precisamente la Consagración de Rusia a su Inmaculado Corazón para que esta nación no esparciera sus errores por todo el mundo. Por tanto, creo sinceramente que el Papa sigue su camino errático cada vez de un modo más abierto, y nos permite darnos cuenta quien está sentado en la Silla de Pedro.
Ante esto, solo puedo decir lo mismo que la Virgen a los tres pastorcillos de Fátima: «Rezad constantemente el Santo Rosario por la paz del mundo». Pues sí, hermanos. No soltemos este arma que nos ha regalado nuestra Madre del Cielo. Es el arma que destruirá y cegará a Satanás en éstos, sin duda alguna, los Últimos Tiempos previos a su Triunfo.
Montserrat Sanmartí.
Con esta frase, el Papa no defiende ni justifica el comunismo, sinó que indica que todo lo que tiene de lucha por la igualdad y justicia social ya lo vivían los primeros cristianos, hace veinte siglos.
Con esta frase, David, el Papa pone a la misma altura la figura de Cristo y la de los asesinos comunistas que han hecho millones de muertos. Él solo se ha desenmascarado diciendo esta barbaridad. El comunismo no tiene nada de cristiano. Le recomiendo leer el artículo publicado anoche de don Rafael Laza y que le puede aclarar algunos conceptos erróneos. https://comovaradealmendro.es/2016/11/adesso-il-comunismo-ahora-comunismo/
En cuanto a la igualdad y justicia social que los cristianos vivían en sus primeras épocas, es claro que así fue, pero no por las ideas de lucha por la igualdad o justicia social, sino por amor a Dios y a los demás. El comunismo busca lo contrario, «igualdad y justicia social» motivados por el odio a los demás y a Dios que coarta, según ellos, su libertad.
“Desde el exilio”, que suele decir para encabezar sus comentarios sobre la rabiosa actualidad el polígrafo, periodista e historiador César Vidal -y cristiano protestante, sobre todo protestante-, escucho vía Internet la emisora canaria Radio San Borondón…
Ayer 20 de noviembre, Francisco Franco cumplía 41 años de fallecido. Mas estos izquierdistas inagotables, estos neomarxistas indómitos al desaliento, estos multiculturalistas secularistas a tope siempre tan cheguevaristas, bolivarianos y marxistas leninistas y de Las Hespérides, no pierden ocasión: “Franco fue un asesino genocida, un guerracivilista, un asqueroso criminal, un hipócrita dictador, un fascista embrutecedor, el conculcador de la idílica legalidad de la II República española”…
Ahora defienden a Podemos, ¡a Podemos!, conectando en directo con una conferencia (¿?) de Pablo Echenique, o Pablo Echeminga, como lo rebautiza el inimitable Jiménez Losantos; inimitable incluso cuando uno cree discrepar de algunas de sus siempre contrastadas opiniones. Pablo Echenique, sí, el mismo que, siendo argentino, pide la independencia de Aragón del resto de España.
Esto es, se alinean con las banderas del comunismo, el separatismo, el laicismo, el odio a Cristo y a su Iglesia, el terrorismo siempre que sea de inspiración marxista, la eutanasia, la lucha de clases, el libertinaje sexual, el aborto, la ideología de género, el feminismo radical, la homosexualidad, la mentalidad antinatalista…
Miles de horas de mi vida habré invertido en escuchar sus programas, y jamás de los jamases los he escuchado pedir perdón por los 100.000.000 de asesinados por el comunismo en menos de un siglo en el mundo entero. De manera que acaso siendo el marxismo llevado a la práctica de gobierno la ideología más criminal de la historia de la humanidad, o al menos una de las más sanguinarias, siguen empeñados en insultar a Francisco Franco, en culparlo de todos los males de la España actual, hasta de la subida del gas en la España de 2016, ¡y no permiten ni una palabra crítica contra el Che Guevara, por ejemplo, ateo y marxista despiadado y sediento de sangre y de odio al enemigo!
No hace falta confesar que no soy franquista, pero desde luego, este izquierdismo desbordado, sectario, manipulador, inmisericorde con Cristo y su Iglesia… Ahora ensalzan al papa Francisco, para lo cual convocan a la Teología de la Liberación: en 10 minutos, la habrán nombrado por lo menos 25 veces. ¡Francisco un gran Papa, el que justamente necesita este mundo, frente a “fachas” como Benedicto XVI y Juan Pablo II!, repiten una y otra vez.
Me cuesta creerme que se puedan creer lo que cacarean. En definitiva: estos enemigos de Cristo y de su Iglesia, estos ateos y marxistas recalcitrantes, partidarios del ignominioso crimen del aborto, estos indocumentados que no tienen ni pajolera idea de la Iglesia como misterio de salvación -es más, es que la odian-, ¡alabando al papa Francisco!
Y tan panchos se quedan, nunca mejor dicho, por lo de Francisco. Mas insisten: la Iglesia es una estructura de poder de 2.000 años de historia y el papa Francisco está coadyuvando a derribarla, esclarecerla, iluminarla…
Hay un clamor en Internet contra el nefasto pontificado de Jorge Mario Bergoglio en bitácoras como “Rambla Libre”, “Libertad Digital” y “Alerta Digital” (las tres, de información general, laicas, no confesionales católicas), y en “Adelante la Fe”, “Nacionalismo Católico San Juan Bautista”, “En Cristo y María”, “Infovaticana”, “Comovaradealmendro”, “Wanderer”, “Enraizadosencristo” , todas estas de información y formación católicas (hay al menos una docena de bitácoras más, alarmadas día a día “in crescendo” con este pontificado demoledor), y resulta que los comunistas e izquierdistas de Radio San Borondón alaban al papa Francisco, ¡celebrándolo como un gran Papa anticapitalista superior a los “fachas” Juan Pablo II y Benedicto XVI!
¡Ellos y ellas ultraizquierdistas y por ende secularistas radicales, que pasan olímpicamente de la doctrina de la fe de la Iglesia, defienden la «grandeza» del papa Francisco! ¡La defienden precisamente los correligionarios de una ideología causante de 100.000.000 de muertos en apenas un siglo y que jamás de los jamases piden perdón por ello, ni por la persecución contra la Iglesia que siempre, invariablemente desde que han llegado al poder, los regímenes comunistas han causado a la llamada Esposa de Cristo, precisamente por “odium fidei”!
Desde esas ondas radiofónicas atlánticas se defiende (repitamos la lista) el aborto, el divorcio, la ideología de género, la eutanasia, el odio a Cristo y a su Iglesia, la lucha de clases, el libertinaje sexual, los nuevos modelos de familia, la sectaria y zapateril memoria histórica, el comunismo (genocida, valga la redundancia), el laicismo, la homosexualidad, la ideología de género, el feminismo radical, la mentalidad antinatalista, ¡y resulta que defienden la grandeza del papa Francisco!
Alucinante. Como si de una película de terror de la serie B o de una comedia bufa… ¡El mundo al revés!