Queridos lectores de Como Vara de Almendro; iniciamos hoy un nuevo espacio que nos llena de satisfacción. En él nos haremos eco de las noticias que nuestro estimado amigo y colaborador habitual en nuestra página, el prestigioso vaticanista Marco Tosatti, tiene a bien publicar en su blog Stilum Curiae, ya sea como comentarios a sus publicaciones, ya como análisis del propio vaticanista, ya en forma de traducción de sus mejores artículos. Como recordarán, hace poco empezamos a traducir fielmente sus extraordinarios escritos y pareciéndonos poco, por la cercanía y amistad que le profesamos, nos atrevimos a invitarle como «tertuliano» en una tarde de sobremesa, como cuando después de una comida entre buenos amigos la conversación se hace agradable y apetecible, alargándose hasta bien entrada la noche. ¡Cuántas veces nos ha sucedido que estando a gusto con alguna persona que nos ha visitado para almorzar, hemos alargado la sobremesa y hemos improvisado una cena para poder seguir un rato más compartiendo la amistad y la buena conversación……! Del mismo modo nos ha pasado a nosotros con Marco. Nos sentíamos tan a gusto leyéndole que le pedimos que se quedara un poco más con nosotros y ha aceptado amablemente a nuestra propuesta.
Y hoy, para iniciar con un buen entrante en esta mesa a la que todos ustedes están invitados, les ofrecemos una exclusiva entrevista que nos concedió a Como Vara de Almendro hace escasos días, y cuyas respuestas agradecemos sinceramente a Tosatti. En ella apreciarán su franqueza, su sinceridad y su sintético y directo lenguaje, cualidades que los buenos amantes de la lectura siempre agradecemos. A quienes escribimos en la página nos ha mostrado con esta entrevista que la experiencia de tantos años en la profesión periodística es un grado.
Grazie, Marco!!!
ENTREVISTA A MARCO TOSATTI
Sí y no. Mi padre murió cuando yo tenía un año y medio. Mi madre era católica, me llevaba a misa y frecuentaba la Iglesia hasta los 13 años. Luego me he alejado y llegué a ser agnóstico, si no ateo. Ciertamente anticlerical. Mucho más tarde, hace como unos veinte años, he recomenzado a creer y a rezar.
Absolutamente no. Comencé a ejercer de periodista de joven, sobre los 19 años. Mi padre era periodista – murió como periodista en el avión del Gran Torino en el accidente de Superga -, mi hermano mayor también se hizo periodista y yo no pensé nunca en otra cosa que en ser periodista también. He escrito de muchas cosas: deporte, crónica y sucesos, cultura, política, diplomacia, sindicatos, parlamento… Luego, por casualidad, en 1981 el director me preguntó si estaría interesado en seguir las noticias del Vaticano y yo dije que sí, aunque no sabía nada de la Iglesia.
Durante el pontificado de Pablo VI no escribía de la Iglesia. Viví los pontificados de Juan Pablo II y de Benedicto XVI. Dos grandísimas figuras, aunque de manera distinta.
Juan Pablo II ha sido la persona que, sin saberlo yo cómo, me ha llevado de vuelta a la oración y a la fe. Era una persona de una inteligencia excepcional. De hecho, se perdía en la oración como un niño. Creo que era este contraste conmigo lo que comenzó a trabajar dentro de mí.
Todo lo que Benedicto escribe es de una calidad excepcional. Me encantan sus libros sobre Cristo. Su gentileza y mansedumbre. “No he conseguido nunca saludarle yo primero”, me dijo un obispo que vivía en el Palacio de la Congregación de la Fe. Y me contó un episodio. Cuando la vieja portera del Palacio llegó a la edad de la jubilación, querían darle una casa lejos de San Pedro, pero ella quería quedarse donde había pasado la vida. Ratzinger se impuso y la portera se quedó viviendo allí.
Le responderé con una frase de Mao Tze Dong: grande es la confusión bajo el cielo. Pero, a diferencia del líder chino no diré que es una cosa óptima. Es una cosa pésima.
Creo que estamos frente a un ataque sin precedentes a algunos puntos clave del cristianismo: la Eucaristía y el sacramento del matrimonio. No solo. Se va contra la Palabra misma de Jesús sobre el matrimonio. Jesús en los Evangelios ha hablado claramente de ello y los expertos piensan que aquellas palabras son auténticas, también porque iban contra la cultura del tiempo. Si no se da importancia y no se valoran aquellas palabras, ¿por qué dar importancia al resto del Evangelio?
Cuando Pablo VI hablaba de que el humo de Satanás sabía bien lo que estaba sucediendo. Y ahora nosotros lo vemos con nuestros propios ojos. estamos viviendo tiempos extremadamente difíciles y duros en la Iglesia.
Es probable. No soy profeta o vidente, pero como hombre de la calle puedo pensar que sí.
Rezar y tener confianza. Practicar la fortaleza en las pruebas. “Non praevalebunt (no prevalecerá el Infierno). Cristo nos lo dijo así. Debemos creerlo.
Marco, muchísimas gracias por su tiempo y por sus palabras que nos llenan de esperanza y que nos fortalecen en esta prueba por la que estamos atravesando. Le esperamos en nuestra próxima sobremesa para compartir sus instructivos puntos de vista y sus opiniones que tanto bien nos hacen.
Entrevista en exclusiva para Como Vara de Almendro realizada por:
Padre Elías
Antonio José Sánchez
Montse Sanmartí
(1)Nota del traductor: es forma de cortesía que la persona menos importante tome la iniciativa de saludar a la más importante, y no al revés.
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Felicidades..por esta entrevista y por hacernos mas familiar la gran figura de Tosatti!!!