Bux: crisis, divisiones, apostasía. Es necesaria una profesión de fe del Papa. Como Pablo VI

Stilum Curiae- 22 junio 2017- Marco Tosatti

El National Catholic Register publica una interesante entrevista de Edward Pentin a Monseñor Nicola Bux, un conocido teólogo italiano, escritor (la última de sus obras es «Con los sacramentos no te metas») profesor de teología y consultor de la Congregación para las causas de los Santos y para la Doctrina de la Fe.

Se afirma que para resolver la actual crisis en la Iglesia relativa a la enseñanza y la autoridad del papa, el mejor modo sería una declaración de fe del Pontífice para corregir sus palabras y gestos «ambiguos y erróneos» que han sido interpretados de manera no católica. Según Bux, la Iglesia está viviendo «una plena crisis de fe» y la tempestad que la atraviesa está causada por la apostasía, «el abandono de la fe católica».

Hace solo unos días se hizo pública una carta en la cual el cardenal Cafarra, en nombre también de los otros tres purpurados, (el 25 de abril) pedía audiencia al Pontífice para hablar de la exhortación apostólica Amoris Laetitia y de sus interpretaciones opuestas. La carta no obtuvo nunca respuesta. Monseñor Bux comenta que «Para muchos católicos es increíble que el Papa pida a los obispos dialoguen con quienes piensan de manera diferente (por ejemplo, los cristianos no católicos) pero no quiera encontrarse primeramente con los cardenales que son sus principales consejeros». «Si el Papa no defiende la doctrina no puede imponer disciplina».

Traducimos aquí un pasaje muy significativo de la entrevista.

» El tema es: ¿Qué idea tiene el papa del ministerio Petrino, tal como se describe en la Lumen Gentium 18 y codificado por el Derecho Canónico? Frente a la confusión y la apostasía, el Papa debe hacer una distinción-como hizo Benedicto XVI -entre lo que piensa y dice en privado, y lo que debe decir como Papa de la Iglesia católica. Para ser claros: el Papa puede expresar sus ideas privadamente como un estudio, con sus argumentos y disertaciones que no están definidos por la Iglesia, pero no puede hacer afirmaciones heréticas, incluso en privado. De lo contrario sería igualmente herético.

Creo que el Papa, sabe que cada creyente-que conoce los dogmas de fe, que proporciona a cada uno el criterio para saber cual es la fe de la Iglesia, aquello que cada uno debe creer y lo que cada uno debe escuchar-puede ver si está hablando o actuando de un modo católico, o está yendo contra el sensus fidei  de la Iglesia. También un solo creyente puede pedirle cuentas. Así que cualquiera que piense que pesentar dudas (las dubia) al Papa no es un signo de obedicencia, no ha entendido, 50 años después del Vaticano II, la relación entre el papa y el conjunto de la Iglesia. La obedicencia al Papa depende solamente del hecho que a él se le ha dado el legado de la doctria católica, cuya fe debe continuamente profesar delante de la Iglesia. 

¡Estamos en plena crisis de fe! Por tanto, para cerrar las actuales divisiones, el Papa, como hizo Pablo VI en 1967, frente a teorías erróneas que circulaban poco a poco después de la conclusión del Concilio, debe hacer una declaración o profesión de fe, afirmando aquello que es católico y corrigiendo aquellas palabras y aquellos gestos ambiguos y erróneos-suyos y de los obispos-que son intrepretados de manera no católica.

De lo contrario, sería grotesco que mientras se busca la unidad con los cristianos no católicos e incluso con los no cristianos, la apostasía y la división sean alimentadas dentro de la Iglesia católica, «Para muchos católicos es increíble que el Papa pida a los obispos dialogar con quien piensa de forma diferente (por ejemplo los cristianos no católicos) pero no quiera encontrarse primeramente con los cardenales que son sus consejeros principales. Si el Papa no defiende la doctrina no puede imponer disciplina. Como dice Juan Pablo II, también el Papa necesita de la convertisón, para estar en posición de reforzar a sus hermanos, segun las palabras de Cristo:  ‘Et tu autem conversus, confirma fratres tuos’”.

Puede leer la entrevista en inglés aquí. 

 
Marco Tosatti
Artículo original Stilum Curiae
Traducido por Como Vara de Almendro