En su tiempo, ambos prelados fueron testigos solitarios de la enseñanza papal sobre el matrimonio.
San Juan Fisher fue el único obispo en la Inglaterra del Siglo XVI en levantarse por la enseñanza de la Iglesia sobre el matrimonio, y le costó la cabeza. El Cardenal Raymond Burke es uno de los pocos prelados en hacer hoy lo mismo, y no le preocupa perder su solideo cardenalicio.
En una entrevista en Diciembre pasado, el Card. Burke fue cuestionado acerca del reportado temor político que prevalece en el Vaticano, y que está intimidando aparentemente a los prelados para guardar silencio. El ex presidente de la Corte más elevada en la Iglesia trajo el ejemplo de San Juan Fisher, quien en vez de separarse a sí mismo de la enseñanza papal sobre el matrimonio, murió bajo el reinado del Rey Enrique VIII.
“Uno piensa, por momentos, en el caso de San Juan Fisher en Inglaterra en la época de Enrique VIII, cuando fue el único obispo en sostener la verdad de la Fe, y quien defendió a Cristo y su Santa Iglesia”, señaló el Card. Burke.
Haciendo alusión a la condena que él y tres compañeros prelados recibieron cuando presentaron a la Santa Sede sus ahora famosas dubia sobre la enseñanza del Matrimonio, el Card. Burke, hablando sobre el obispo Juan Fisher, relató, “Obviamente algunos trataron de desanimarlo de hacer esto, señalando que él era el único. Y de manera correcta él respondió que aún si fuera el único, el hecho importante sería que estaba hablando por Cristo, cumpliendo su deber como obispo”.
En una entrevista por separado en Enero pasado, se le preguntó al Card. Burke si temía perder su rango como cardenal debido a un descalabro político por buscar clarificar la exhortación sobre el matrimonio, Amoris Laetitia.
“Lo que temo es aparecer ante Nuestro Señor en el Juicio Final y tener que decirle: ´No, no te defendí cuando fuiste atacado, y la verdad que Tú enseñaste era traicionada”, respondió. “Y así, ni siquiera lo considero”.
En 2ª de Timoteo 4, 2. San Pablo exhorta:
Predica a tiempo y a destiempo…
Predica la Palabra, insta a tiempo y a destiempo, reprende, censura, exhorta con toda longanimidad y doctrina. Porque vendrá el tiempo en que no soportarán mas la sana doctrina, antes bien con prurito de oír se amontonarán maestros con arreglo a sus concupiscencias. Apartarán de la verdad el oído, pero se volverán a las fábulas. Por tu parte, sé sobrio en todo, soporta lo adverso, haz obra de evangelista, cumple bien tu ministerio.
Siguiendo los pasos del gran obispo San Juan Fisher, así como de otros mártires ingleses como Santo Tomás Moro, el Card. Burke es un hombre de verdad para todos los tiempos.
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Traducción de Como Vara de Almendro
https://www.churchmilitant.com/news/article/cdl.-burke-st.-john-fisher-of-our-time
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Está muy bien lo que dice el cardenal Burke, pero debería seguir adelante y declararle hereje, puesto que Bergoglio guardó silencio ante estos cuatro cardenales y sin embargo Sí que respondió a los obispos argentinos, alemanes y a los de Malta que, Sí que les podían dar la comunión a los adúlteros. Porque mientras no se le declare hereje, Bergoglio, seguirá adelante en su destrucción doctrinal, ya que tiene el voto de todos los que guardan silencio como perros mudos.
Además, que sepa Burke, que lo siguiente -si es que le declara hereje- es que el, será excomulgado junto con sus tres compañeros. Pero dicha excomunión viniendo de un falso papa no tiene validez. Porque aún están en el limbo los que creen que Bergoglio es un mal papa. Bergoglio es una de las bestias del Apocalipsis 13, y le está preparando la entrada triunfal al anticristo.
En la 2ª de Tes 2, nos dice S. Pablo, que el hombre inicuo no puede usurpar el trono sagrado hasta que no sea quitado de enmedio aquel que se lo impide. Habiendo ocurrido ya en Febrero de 2013, que fue quitado el KATEJON, (Benedicto XVI). Si los consagrados no despiertan es por cobardía. Y si no tienen suficiente, Jesucristo les advierte: Por sus frutos los conoceréis. Bergoglio es el único ocupante del trono sagrado en veinte siglos, que se ha esforzado obsesivamente en destruir la doctrina divina. Y ya no valen justificaciones como que los periodistas lo tergiversan todo, o que por internet mienten mucho. Quien realmente quiere saber la verdad la investiga, como hacemos unos cuantos.
Estoy convencido de que el CISMA vendrá cuando el papa legítimo corrija a Bergoglio por querer realizar la abolición eucarística, como indica la Beata Ana Catalina Enmerich.
Con Cristo y Maria-los dos corazones unidos.